SEÑOR DIRECTOR La última encuesta CEP muestra una evaluación crítica de la ciudadanía a la gestión del gobierno en salud, a pesar de haber sido ésta una parte importante de su programa. Resulta clave que el gobierno invierta más en salud, lo que se traduciría en más puestos de trabajo y en una mayor resolución de los problemas de los pacientes. Adicionalmente, es imperativo que implemente una forma de administración que mejore la productividad y eficiencia del sector.
El bajo presupuesto destinado a salud y el atraso en los pagos -la millonaria deuda hospitalaria es ya casi inmanejable-no van en la línea de mejorar la calidad y cantidad de las prestaciones, y contribuyen al desánimo de los pacientes y de quienes trabajan en el sector. ¿Cómo puede un paciente que es atendido en el piso de un hospital, o cuya pierna es inmovilizada con cartón y cinta adhesiva, evaluar bien la atención de salud? Estamos en presencia de un círculo vicioso que requiere de acciones concretas para romper la inercia que trae desde hace muchos años.
Los proveedores de dispositivos médicos (no de fármacos), al borde del abismo económico a causa del no pago por nuestras prestaciones, creemos que es el momento oportuno, ahora que llegó un nuevo ministro a la cartera, de regularizar una situación que, de mantenerse, generará desabastecimiento, quiebra de cientos de Pymes, cesantía y pacientes en aun peores –si esto es posible-condiciones.
Fuente: La Tercera, 24 de Junio de 2019.
