A comienzos de 2018, el ministro de salud (Chile) proyectó a diciembre del mismo año, una deuda hospitalaria de $800 mil millones (US$ 1.214 millones), cifra que aún hoy no se sabe si es la correcta ya que no se ha actualizado la información pública. No obstante esta desinformación, para la Asociación de Proveedores de la Industria de la Salud (APIS A.G), gremio que reúne a los proveedores de dispositivos médicos del sistema de salud público y privado del país, la deuda prácticamente se duplicó, conforme a la información que maneja de sus asociados a diciembre de 2018.